lunes, 19 de marzo de 2012

¡VIVA LA PATRIA Y VIVA LA PEPA!

Hoy celebramos los doscientos años
de la promulgación por patriotas
de una constitución que pretendía
traer más libertad después de aquella
monarquía absoluta impresentable.

El rey felón (un tal Fernando Séptimo),
hizo traición a todo juramento
y en sangre ahogó lo que era aquí decencia;
fuera error olvidar la guillotina
que al entusiasmo de gritar "Viva la Pepa"
siguió eso otro del "Vivan las Caenas".

¿Maniatados sordo-mudos todavía?;
¿cómo es posible que en carteles oficiales
para la promoción de aniversario,
la bandera de España no aparezca?;
con estos memos, corruptos dirigentes
¿atraeremos invasiones extranjeras?.


Las patrias son a modo de los cuerpos: 
de ellos nos revestimos, los usamos, 
protegemos, amamos, defendemos, 
(para un día, como todo, abandonarlos). 

Sería absurdo ir contra el propio cuerpo, 
no podemos dañarlo sin dañarnos;
mas con patria ¿qué hacemos?, ¿ignoramos 
su identidad, su historia, su destino?…

Sólo una vez perdida y desterrados, 
añoramos el bien que no supimos 
valorar y dimos por supuesto, 
amputados ya en miembros cual lisiados.

Que si al cabo defensas no proveemos 
a infecciones malignas que lo atacan, 
habrá que lamentar que sin remedio
sea por mucho tiempo al mal postrado.

Propugno sí, el amor a la patria 
que es escala mayor a aquella del terruño, 
de mi ciudad, del pueblo, o de mi barrio, 
mi calle, mi portal, o mi vivienda.

Cada cosa debe tener su ámbito:
así el ejército debe ser europeo,
la educación nacional e igual a todos,
y a un nivel ya local pues los festejos…

Todo son como capas sucesivas
que revisten el propio cuerpo físico 
al que si yo protejo, un otro tanto 
debiera hacer con esas coberturas.

Patria, Nación, Estado, no tomemos 
a la ligera ninguna de estas cosas 
pues habrá otros extraños que más fuertes 
aprovechen debilidad a esclavizarnos.

No toleremos gobiernos mamarrachos 
que ven en ello "conceptos discutibles"
(y sólo en cambio a una gran vaca donde 
ordeñar en sus ubres hasta anemia). 

Pues no vale el pensar que todo vale 
y ceder poco a poco, o mucho a mucho, 
aquello que nos marca diferencias: 
ser español, europeo, occidentales… 

Que si algún día debido a mis pecados,
me tocase nacer como marciano,
defendería tener escamas verdes
y trompetillas diciendo "¡Viva Marte!".

Pero hoy por hoy, defiendo defendamos 
nuestra cultura de toda la amenaza 
que a través del "buenismo" y el "todo vale" 
se cuela "de rondón" por puertas falsas.


© albertotrocóniz / 12
Texto de: "TAL COMO LO VEO"
Imagen de: "FOTOFILTRADA".



Otros “Posts” del “Blog” relacionados
en el Tablero “TORRE DEL HOMENAJE”:

No hay comentarios:

Publicar un comentario