¿Manifestódromo?, ¡apoy@ iniciativa!:
que haya un lugar quizá en el extrarradio,
donde puedan hacerse tales actos
sin que se “joda” a demás ciudadanos;
por ejemplo a “honrados comerciantes”
que pagan puntualmente sus impuestos
y sufren los efectos en sus pieses
de algunos pisoteando sus derechos
(empleándose a fondo con izquierdos).
Sería un lugar adecuado y a cubierto
con dotación de accesos y de parking
guarecido de lluvias e inclemencias
que deslucen y aguan los eventos.
Debieran darse cuenta sindicatos
y otras hordas afines, que los tiempos
son ahora los de audiovisuales
y sería bueno tener plató al efecto.
Se evitaría el "tema" de la lluvia
que es “bicha negra” en todos los supuestos
(bajo paraguas parezcan cucarachas
divisados de arriba desde el cielo).
Asimismo bajo el sol del verano
nadie asiste sobre un asfalto hirviendo,
cuando ir-viendo pudieran desde casa
tan fresquitos pancartas y oír panfletos.
No cabrían ya más las discusiones
de si millones, o miles, o si cientos;
se sabría perfectamente aforo
por los metros cuadrados que hay completos.
Mucho arquitecto hoy “mano sobre mano”
se apuntaría al concurso del proyecto
cual ya se hizo en Brasil con el “Sambódromo”
del gran Oscar Niemeyer, el maestro.
Yo tengo “in mente” algunas ideicas
preparadas por si se lleva a puerto:
no sé porqué me viene a la cabeza
el burdel de Ledoux (nunca fue erecto).
Gran ocasión la de ahora el levantarlo
en tamaño “King-Size” ¡qué monumento!
con un aspecto fálico de hipódromo
cual en plaza “Nabona” hubo en su tiempo.
La "picha" larga con gradas por los lados
para acoger miles de espectadores,
la tele y periodistas por sus "huevos"
que den cumplida cuenta del exceso:
ver desfilar dando vueltas y vueltas
por varias veces con entrando y saliendo
alrededor del eje de la espina
(rematadas por Neptuno y Cibeles)
a ménades, bacantes, corifeos…
en procesión portando sus pancartas
gritando como loc@s sus consignas,
tirando piedras a policías (de plástico)
que en plan estatuas adornen burladeros.
Por el trayecto podría haber semáforos
luciendo siempre el monigot@ en roj@
para que así practiquen transgresiones
con el saltárselos y el morbo que va anejo.
Un gran reloj que dé las campanadas
como en Puerta del Sol y que se excite
con la memoria del lugar emblemático,
la mala baba (de Paulov el reflejo).
Cajeros automáticos "de pega"
para embutirles por dentro silicona,
y escaparates con grandes cristaleras
y así darse el gustazo de romperlos.
Contenedores de los de la basura
para volcarles la mierda por el suelo
y autobuses que antes de ir al desguace
puedan pegarles fuego en plan fallero.
Volvería el desfile recurrente
por varias veces pasando el mismo punto
y así parezca fueran miles y miles
(alternando cabeceras con pancartas).
Todo el perímetro, como ya digo, gradas;
alrededor la explanada de autobuses,
y por los bajos de la enorme estructura
el parking reservado a los libertos
… más almacenes para los materiales:
los de la propaganda y altavoces
y no tener que acarrearlos de nuevo
cuando otra vez manifestarse toque.
Supermercado donde saliese gratis
irse con carro repleto de la "compra"
(no olvidarse de haber incluido en lista
las cerillas, pintura, silicona …)
Podría haber tabernas para masas
a reponer las fuerzas: cervecitas
con su tapa en ración de berberechos
acompañando la cosa del “bocata”
… y restaurantes para los dirigentes
—emparedados no comen Bubu y Yogui—
más adecuados esos de cinco estrellas
de michelines para escogidas grasas.
Boutiques de lujo para comprarse un Rolex,
agencias de cruceros por el Báltico,
tiendas muy caras de marroquinería
donde adquirir bolsones "pa la pasta".
En la explanada, como final de fiesta,
pudiera organizarse una kermese
quemando euros cual "pa asar una vaca"
y darle a plebe, más coca y suripantas.
Ya lo político aparte, se podría
amortizar tales infraestructuras
con otros usos como los carnavales,
o en homenajes rendidos a prohombres.
Y por las noches, por entre las arcadas
“matando dos pájar@s de un tiro”
concentrar lo de l@s prostitut@s
que es gran problema a dónde trasladarl@s.
Otrosí hágase con los mendigos
que pernoctan en calles emporcándolas
y no quieran recogerse en hostales;
¡proporcionenséles los soportales!.
Es de esperar también que delincuentes:
descuider@s, carteristas y trileros
esmalten tal estancia con presencia
(que la gran hampa ya se refugia en bancos).
Unas cosas con otras Monipodio
nada habría de reprochar a anfiteatro
y daría tema a tantos escritores
para hacer novela picaresca.
Eso sí, hay que requisar droga
y multar las carreras de ilegales
y otros usos “non sanctos” de las gentes,
lo que es muy fácil instalando allí cámaras.
¡Gran espectáculo "pa" tardes del domingo;
vámonos al circuito de jarana!;
quizás nos salga un ligue en esa "maní"
y ¡viva Paracuellos del Jarama!.
y ¡viva Paracuellos del Jarama!.
© albertotrocóniz / 14
Texto: de “TALCO MOLO EO”
Imagen: "Oikema", Proyecto para la Casa del Placer
Claude Nicolas Ledoux, 1789,
de “MUSEO”
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